Argentina aprobó el examen del GAFI y no entró a la lista gris

Se trata de una evaluación sobre el sistema de combate de delitos financieros. El principal objetivo del GAFI es desarrollar políticas para enfrentar el lavado de dinero.

Delegación argentina encabezada por el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona.

Buenos Aires.- El Gobierno nacional celebró que Argentina no haya quedado en la lista gris tras el examen del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). “Zafamos de la lista gris del GAFI”, celebró un mensaje de una experta en prevención de lavado de dinero (PLA) apenas se conoció el veredicto respecto de la evaluación que hizo sobre el sistema de combate de delitos financieros de la Argentina. “¡¡¡¡¡No estamos en lista Gris!!!!!”, reaccionó otro consultor especializado.

La licencia de poner tantos signos de exclamación es a fin de reflejar el entusiasmo que generó este jueves, cerca del mediodía, en quienes siguieron de cerca todo el proceso, la noticia de que el GAFI aprobó la evaluación sobre la Argentina y decidió no incluir al país en la lista gris.

El Gobierno está muy entusiasmado con la novedad y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, quien encabeza el grupo de funcionarios que viajó a París, festejó que, “gracias al arduo trabajo del Gobierno de Javier Milei, Argentina ha evitado caer en la lista gris del GAFI”.

Este resultado favorable para Argentina asegura la inversión de capitales extranjeros y la integración del país en el sistema financiero mundial.

El GAFI es una organización clave en la lucha contra delitos financieros a nivel mundial, estableciendo normas y revisando su cumplimiento por parte de los países. Su principal objetivo es desarrollar políticas para combatir el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la proliferación de armas de destrucción masiva.

Evaluación del GAFI: Argentina tendrá tarea para el hogar

Por suerte, el fantasma de la lista gris quedó ahuyentado para la Argentina, pero Perrotta advierte que, ahora, resta esperar el informe completo, lo que podríamos llamar “la letra chica”, en la que se definirán algunos aspectos que el Gobierno debe revisar, tales como:

* la real autarquía de la Unidad de Información Financiera (UIF),

* la vuelta de la UIF a participar como querellante en las causas de corrupción (desactivada durante la gestión anterior),

* mejoras en la eficiencia de la justicia (la principal debilidad de Argentina),

* extensión regulatoria de los enfoques basados en riesgo a todos los sujetos obligados y

* seguimiento del Blanqueo.

Fuente: Ambito.com y Minuto Uno