Así lo indicó el obispo de la ciudad, Gabriel Mestre, tras el triunfo de la Selección Argentina. “Nos ayuda a reencontrarnos con nuestra identidad y fraternidad como argentinos”.

El padre obispo Gabriel Mestre festejó el triunfo de Argentina y en medio de la alegría popular dijo “esperemos que todo lo bueno del mundial, que nos ayuda a reencontrarnos con nuestra identidad y fraternidad como argentinos, la podamos proyectar a todos los ámbitos de la vida».
“La Selección nos demostró que tenemos que jugar como equipo. tenemos la fuerza en nuestro corazón para continuar adelante con tantas cosas lindas y también con tantas dificultades que el horizonte de la vida nos plantea”, manifestó.
El obispo, con vincha y bandera celeste y blanca se acercó al monumento a San Martín para celebrar con los fanáticos y disfrutar de un domingo que quedará en la memoria de todos.