Municipales en estado de alerta y movilización

El gremio que conduce Gilardi se suma a la lucha de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses con críticas a la conducción del IPS y del IOMA ante las deficiencias en las prestaciones de los servicios.

El conflicto, se da luego de denunciar el “destrato” por parte del Ministerio de Trabajo del Gobierno Provincial y la no convocatoria del Consejo Provincial del Empleo Municipal.

El sindicato de Trabajadores Municipales de Mar del Plata, adhirió al “estado de alerta y movilización” impulsado por la Federación de Sindicatos Municipales de la Provincia (FESIMUBO), luego que desde la entidad denunciaran el “destrato” por parte del Ministerio de Trabajo Provincial y la no convocatoria del Consejo Provincial del Empleo Municipal, en el plenario desarrollado el pasado 2 de agosto en ciudad de La Plata.

En dicho encuentro se destacaron las críticas hacia la conducción del Instituto de Previsión Social (IPS) y del Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA) “ante las deficiencias en las prestaciones de los servicios que afectan tanto a los trabajadores activos como a los jubilados; al destrato recibido por parte del Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, cartera a cargo de Mara Ruiz Malec y a la falta de convocatoria del Consejo Provincial del Empleo Municipal”, expresaron a través de un comunicado de la FESIMUBO.

Esto motivó a que desde la Federación, se establezca el “estado de alerta” y la organización de una marcha multitudinaria para fin de mes, para exigir al Gobernador Axel Kicillof que convoque al Consejo Provincial del Empleo Municipal, con el fin de que en dicho órgano, se permita discutir con los intendentes pautas comunes con respecto a las mejoras salariales y condiciones inherentes al empleo, como así también exigir la puesta en vigencia de los Convenios Colectivos de Trabajo en todos los distritos municipales de la provincia de Buenos Aires.

Para finalizar, expresaron que “la necesidad de exigir paritarias que contemplen la pérdida del poder adquisitivo del salario, y consideren la canasta básica de alimentos actual que es de $106.000 y la canasta familiar de $150.000”.