Tenían plazo hasta el último día de octubre. Argumentan que existe un contexto de dificultades, en particular con faltantes y demoras en entrega de materiales. Creen que el deliberativo entenderá el planteo y les dará unas semanas más para cumplir con lo exigido.
La conducción de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica presentó una nota en el Concejo Deliberante para que se autorice a bares, confiterías y restaurantes una prórroga hasta mediados del mes próximo para presentar sus proyectos de adecuación de los decks, de manera que respondan a los formatos propuestos por el municipio.
El plazo que se había fijado desde la administración comunal venció con el último día de octubre, por lo que los empresarios y comerciantes del ramo están buscando tener un tiempo más para cumplir con las exigencias.
Argumentan, entre otros aspectos, que estos últimos tiempos se han vivido en un contexto de dificultades económicas generales que derivaron, por ejemplo, en la escasez o faltantes –según el caso- de materiales que se utilizan para este tipo de estructuras.
“La restructuración de los decks instalados a efectos de adecuarse a lo estipulado por la Ordenanza 25.757 y el Decreto 684/23 requiere obras importantes que en gran parte de los casos implican su demolición y la construcción de nuevas estructuras”, advierten a los ediles.
La prórroga solicitada, que debe evaluar y definir el deliberativo, es hasta el próximo 9 de diciembre. Y, a partir de entonces, solicita un plazo de 180 días para que los proyectos pasen por el Colegio de Arquitectos de Provincia de Buenos Aires –Distrito IX, con jurisdicción en esta ciudad, que debe dar el aval que complementa el que inicialmente otorga el municipio a estos módulos.
“Estamos con faltantes de hasta 45 días en la entrega de materiales, por lo que se hace difícil avanzar y cumplir con las obras”, señaló Hernán Szkrohal, vicepresidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica. En la nota remitida al HCD se remarca que “el emprendedor gastronómico se encuentra hoy frente a un exigente desafío toda vez que la necesidad de mantener la clientela lo obliga a absorber los constantes incrementos de la materia prima reduciendo una y otra vez su rentabilidad”.
Tras la aparición en escena de esta alternativa que apareció con la pandemia de coronavirus para mantener activa a la gastronomía cuando estaban prohibidas las reuniones en ambientes cerrados, el municipio apostó en los últimos tiempos a un ordenamiento de estas estructuras que ganaron presencia en la vía pública. En algunos casos con despliegue excesivo y diseños no siempre agradables, por lo que se tomó la decisión de uniformar modelos.
Así las opciones que se abrieron para los prestadores de estos servicios son los modelos similares a los de calle Güemes, con una suerte de “corralitos” con determinadas condiciones y medidas, o bien otros con mamparas y pequeños techos.
En el sector saben que, más allá de la posible vía libre que dé el Concejo Deliberante al pedido de prórroga presentado, tendrán por delante un plazo en el que deberán cumplir lo exigido ya que reconocen en las autoridades una fuerte decisión a lograr un ordenamiento de estas unidades, que se multiplicaron por cientos en distintos puntos de la ciudad.
En la entidad que presentó este escrito destacan el buen diálogo que se ha logrado con el municipio por este y otros temas, por lo que entienden que habrá acuerdo y plazos lógicos para que se pueda cumplir con la normativa, aun cuando el inicio de la temporada y el período de mayor actividad en el rubro está a unas pocas semanas.