Los alimentos en Mar del Plata ya aumentaron un 41% en los primeros cuatro meses del año

Así lo informaron desde el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci). Según el relevamiento de precios de los 57 productos que componen la Canasta Básica Alimentaria (CBA) en los comercios de cercanía de Mar del Plata y Batán, que mensualmente realiza el Isepci, en abril la CBA aumentó un 8,5% en comparación al mes de marzo.

Según el relevamiento mensual del Índice Barrial de Precios (IBP) que realiza el Isepci en 130 comercios de cercanía de los barrios populares de Mar del Plata y Batán, la Canasta Básica de Alimentos (CBA) alcanzó a nivel local, en el cuarto mes del año 2023, los $80.119. De esta manera, una familia de dos adultos/as y dos hijos/as que en abril de 2022 necesitaba $36.730 para cubrir sus alimentos indispensables, un año después precisa $43.389 más para el mismo fin, lo que configura un incremento interanual de más del 118,3%.

Por su parte, el director del Isepci en Mar del Plata, Rodrigo Blanco, completó la información: “El incremento de las Canastas Básicas en el primer cuatrimestre de 2023 (40,7% en alimentos y 36% en Canasta Básica Total) es el más alto de los últimos cinco años, lo que habla de una aceleración inflacionaria, que por ahora, no encuentra freno.  En el mismo lapso la pobreza no baja e incluso crece la indigencia, o sea que hay más familias que no tienen recursos suficientes para alimentarse adecuadamente.”

Los aumentos de abril, agregados a los que se vienen produciendo desde diciembre pasado, suman una suba de 40,7% para el primer cuatrimestre de 2023. En abril todos los rubros reflejaron un aumento similar: Almacén (8,7%), Carnes (8%), mientras que las Frutas y Verduras subieron 8,5%. En el cuatrimestre las carnes aumentaron 52%, las frutas y verduras 46%, y los productos de almacén 31,5%.

En particular  los aumentos mensuales más destacados fueron en el rubro Carnicería que registró subas en el pescado (17%) y el pollo (39%). Del rubro Almacén los productos que más aumentaron fueron el arroz (25%), manteca (19%), fideos (17%), leche (14%),  aceite (9%). Y en Verdulería subieron fuertemente el tomate (50%), naranja (25%) y huevos (16%).

Rodrigo Blanco, también referente de Libres del Sur en la ciudad, y recientemente lanzado como precandidato a la intendencia de General Pueyrredon, analizó: “Como venimos diciendo y demostrando permanentemente, el aumento incesante de los precios de los productos de consumo básico, no tienen correlato en el incremento de las remuneraciones salariales, jubilaciones, asignaciones sociales, sobre todo de los/as que perciben las mínimas. La consecuencia directa es el sostenimiento desde años de la pobreza en niveles que rondan el 40% y la indigencia en torno al 8% del total de la población. En el primer semestre del 2019 la indigencia llegó al 7,7% en el promedio de todo el territorio nacional, y a partir de allí nunca bajó del 8%, alcanzando un pico de 10,7% en el primer semestre de 2021. Después de dos años de importante crecimiento post pandemia (10% en 2021, y 5% en 2022), en diciembre del año pasado la indigencia seguía clavada en más del 8%. La pobreza llegó a superar el 40% de los argentinos y argentinas en el año de la pandemia: en ese primer semestre alcanzó el 40,9% y subió al 42% en el segundo semestre. Pero en 2021, cuando la economía creció 10%, el descenso de la pobreza apenas bajó a 40,6% en el primer semestre y a 37,3% en el segundo. En 2021 mientras la economía siguió creciendo, la pobreza volvió a subir a un 39,2%.”

Complementariamente, Blanco se mostró preocupado por la situación de las familias cuyas viviendas en los barrios populares no cuentan con servicio público de gas natural:  “Con el cambio de estación, y la aproximación de las temperaturas bajas, desde el Isepci también retomamos la medición de la garrafa Así, obtuvimos que durante Abril en Mar del Plata y Batán la garrafa de 10Kg tuvo un valor promedio de $1860, con topes máximos de $2500. A su vez, el acumulado interanual arroja que la garrafa aumentó un 140%, pasando de costar $770, a sumar $1080 en un año.”

Frente a estos datos, Blanco analizó: “No encontramos que se aplique el descuento por zona fría en la garrafa aprobado por ley. Este incumplimiento continúa siendo una deuda pendiente del estado. Pero además los precios promedios y máximos que relevamos demuestran una vez más la falta de control estatal al superar largamente el monto de $1300 establecido como tope máximo por el gobierno.”

“Los aumentos continuos de los productos básicos del consumo de la población, en especial de los alimentos, hacen estragos sobre el poder adquisitivo de todas las familias, en particular de las de menores de recursos. No hay manera de trasladar la recuperación de la economía a los sectores más necesitados, sin que el estado intervenga en las cadenas de producción y comercialización de los productos de consumo básico de la población. Mientras las intervenciones del estado para regular y controlar a los grupos formadores de precios autodenominados “el mercado” sean una formalidad, y los discursos de los funcionarios no se traduzcan en acciones concretas, el ajuste de cuentas –vía inflación- sobre los ingresos de las mayorías populares, seguirá siendo la variable privilegiada de los grupos económicos concentrados para mantener sus niveles de ganancias extraordinarios, aun en esta época de crisis”, concluyó Blanco.

Respecto de la situación local, Blanco se refirió al último aumento en el transporte público decretado por el intendente Montenegro: “No hay explicación posible que permita justificar un aumento de más de novecientos por ciento (900%) en el boleto, desde la asunción de este gobierno municipal, cuando el boleto valía $18,50. Un número que escapa al aumento de cualquier otro servicio, y que sólo responde a la avidez empresarial del monopolio del transporte público local. El mismo gobierno que aumenta por decreto las ganancias de este empresariado, es el que niega desde hace años el aumento de la tarjeta alimentaria municipal para familias que viven en la absoluta pobreza, y que tiene congelado su monto desde noviembre de 2019, en la irrisoria suma de $876 mensuales, que no alcanzan hoy siquiera para un kilo de carne picada. Ninguna actualización dispuso Montenegro, pese al aumento en el periodo de su gobierno de un 566% de la canasta básica alimentaria, que casi sextuplicó su valor.”