Tras seis años alejado del boxeo, el ex campeón mundial volvió a subirse a un ring y logró un gran triunfo ante el español José Miguel Fandiño por nocaut en El Malecón de Torrelavega de Cantabria.
A falta de un minuto y medio para el final del séptimo round, el boxeador Sergio “Maravilla” Martínez conectó una combinación de dos zurdazos y un golpe de derecha que terminaron por mandar a la lona al local José Miguel Fandiño, quien ya no pudo levantarse y el árbitro dio por terminado el combate con victoria para el argentino.
El nacido en Quilmes, que lució una protección en su rodilla derecha por sus lesiones durante los últimos años de trayectoria, se tiró al suelo de rodillas emocionado por haber logrado un regreso triunfal después de seis años sin competir.
La pelea se realizó ante un grupo reducido de mil espectadores y bajo un estricto protocolo sanitario, en el marco de la pandemia de coronavirus.
“Gracias a todos por estar en esta noche que para mí es maravillosa. No me olvido todo lo que pasé. Fueron momentos durísimos de los cuales ya me levanté y me puse a entrenar. Estaba listo para hacer diez asaltos en caso que hiciese falta. Por suerte Fandiño se cayó, los golpes al cuerpo le hicieron mella”, declaró el argentino desde el ring.
“Necesito contacto con la lona, con las cuerdas, con todo, con el árbitro. La rodillera no hacía falta, pero por las dudas: son seis años sin esforzar al máximo. Lo planificado era hacer un desarrollo de combate largo”, agregó.”¡Demasiado hice la puta madre! Creo que estuve bien”, gritó cuando le preguntaron por el nivel que mostró.
Y entre lágrimas dejó un anuncio: “Esto es el comienzo de algo muy bonito: yo hasta el título mundial no paro. Aprendí a disfrutar el camino…”. ¿El objetivo? El japonés Ryota Murata, actual campeón mediano de la Asociación Mundial de Boxeo: “Tengo en mente seguir haciendo unos combates más. Necesito consolidarme aquí para sentirme seguro para enfrentar a Murata. De aquí a cuatro combates”.